jueves, 4 de octubre de 2012

Ermita de Santa Quiteria y San Bonifacio (31 306402-4658210, 837m)

Vista del templo desde el este.

La localidad abandonada de Montfalcó, cuya toponímia es Monte del Halcón, se encuentra cerca de la frontera con Cataluña, en la margen derecha del río Noguera Ribagorzana, en la salida de éste del estrecho Congosto de Mont-Rebei al sur de la Sierra del Montsec. En concreto la ermita se encuentra en lo alto de una creta que parte del pantano de Canelles, misma creta en la que en la orilla opuesta se levanta la ermita de la Pertusa de parecida hechura. Las vistas que desde lo alto de este precioso enclave se divisan son bellísimas. Hacia el norte la Sierra del Montsec y el Congosto de Mont-Rebei que permite divisar el Pirineo catalán, y al sur el pantano de Canelles rodeado de las sierras exteriores aún altivas, y por último el llano del Valle del Ebro.


La localidad de Montfalcó se abandonó allá por los años 60, como el resto de pueblos de la redolada, como motivo de la construcción del embalse de Canelles. Contaba con 56 habitantes que dejaron para siempre y de golpe y porrazo estas tierras, ahora de "nadie". La ermita fue restaurada por la empresa Prames en el año 1996, quienes hicieron una buena labor de conservación y consolidación del templo, dejándola tal y como debió de ser en origen salvo por las pinturas que debió de albergar en su interior y el ábside semicircular del que sólo restan sillares en el suelo.

Para acceder a ella, la forma más sencilla, es partir desde la localidad de Viacamp y continuar por la pista, señalizada y bien pavimentada, que nos llevará hasta la restaurada Casa Batle convertida en albergue, desde donde parten senderos para cualquier punto del Montsec, y se pueden practicar deportes como la escalada, piragüismo, kayak, senderismo, salto base, parapente, vías ferratas... Ahora se está acabando un sendero que cruzará a Cataluña por una pasarela. Una vez en el albergue, hemos de seguir por una senda que parte desde el mismo aparcamiento del albergue y aparece señalizada. Discurre entre un precioso bosquecillo de robles, carrascas y bojes por la cara norte de una cresta, en 10 minutos estamos en la base del templo.

Mapa de acceso

El templo data de mediados del siglo XI, de estilo lombardo, o al menos la primera mención del lugar es en esa fecha haciendo referencia al dueño, los Condes de Urgel y Barcelona. Canónicamente orientada, posee una plantar rectangular muy irregular debido a esa adaptación a la morfología de la cresta, con una pequeña capilla en el lateral derecho. Tanto la nave como la capilla cierran al este por un muro recto, aunque en el suelo quedan vestigios de haberse cerrado en su momento, la nave central, con un ábside semicircular. Posee un irregular presbiterio en el que aparecen tres angelotes con cabeza y alas muy posteriores. La nave central queda cubierta por una bóveda de cañón, y de la que debió cubrir el ábside no queda ni rastro; reforzada por tres arcos fajones que descansan sobre pilastras adosadas en los muros, y en los paramentos norte y sur aparecen pequeños rebajes protegidos por arcos formeros que simulan pequeños altares laterales. Perpendicular a esta aparece la bóveda, también de cañón, de la capilla lateral. En algunos puntos se adivinan aún las cruces de consagración del templo de colores rojizos. La cubierta es de losas, muy acorde con el conjunto. 

 
Interior del templo. 

Interior del templo mirando hacia el este.

Aparecen seis vanos por los que penetra la luz al templo. Uno en la cabecera de la nave central y en la cabecera de la capilla lateral; se trata de vanos similares de poco interés ya que son posteriores a la construcción inicial del templo. En la misma capilla, en el muro sur aparecen otros dos vamos que parecen haberse realizado también con posterioridad. Por último aparecen otros dos vanos en el muro oeste. Se tratan de los de mayor interés y belleza. El más pequeño aparece en lo alto del muro y de forma circular abriéndose hacia el exterior -ojo de buey; posterior ejecución-, el segundo es una ventana geminada por un parteluz cilíndrico sobre el que descansa un capitel alargado y estrecho sin decoración, a partir del cual arrancan dos arcos de medio punto adovelados. Es este detalle el que hace pensar en un estilo lombardo del templo. Los muros del templo están realizados con sillares pobremente trabajados lo que da lugar a un mampuesto irregular. El acceso al interior se hace mediante una puerta abierta en el muro norte -por la imposibilidad de hacerlo en el sur- en la parte más occidental, se halla en altura por lo que hay que acceder por una plataforma de madera ya instalada. No posee ninguna decoración y se encuentra rematada por un simple arco de medio punto adovelado y estrechas dovelas.

Vista desde el oeste con la preciosa ventana geminada.

Última Actualización: 29/07/2013

Bibliografía y webgrafía:

2 comentarios:

  1. Que preciosas fotos de Santa Quiteria, y la verdad es que la zona conserva grandes tesoros medievales.
    Montfalcó es un enclave maravilloso, y ahora ya con la oportunidad de pernoctar en el albergue y disfrutar de ese entorno unos días... un completo privilegio!
    Gracias por este artículo.

    Por cierto, os paso un enlace del albergue:
    http://www.guiasdelmontsec.es/casa-batlle.html

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  2. La verdad es que salen solas las buenas fotos en este enclave!! Totalmente, y cuando finalicen la unión con Cataluña con la pasarela será un conjunto espectacular lleno de cultura y paisajes.
    Gracias por el cometario.
    Saludos

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