CONDADO DE RIBAGORZA: Castillo de La Mellera (31 295859-4671328, 1096m)

Vista general del roble de La Mellera

La Mellera es una pequeña sierra que se encuentra entre la Sierra del Castillo de Laguarres y Lascuarre. Para acceder a este espectacular lugar, lo podemos hacer tanto desde Benabarre como desde Lascuarre; más recomendable el primero ya que el camino se encuentra en mejor estado.

El camino a seguir hay que tomarlo donde se encuentra el Punto Limpio de Benabarre. Una vez aquí seguimos resto por la pista asfaltada has donde deja de haber asfalto. El único problema se nos presenta al cabo de un kilómetro y poco más, cuando la pista se bifurca, aquí tendremos que girar a la derecha y poco después el asfalto desaparece. En este punto tendremos que continuar recto sin desesperarnos hasta llegar a las casas ecológicas de La Mellera. Aquí hemos de continuar por un camino en el que una señal nos prohíbe el paso. Pasamos de largo, es camino público, y llegaremos hasta unas "flechas" de madera que nos indican hacia donde se encuentra el mirador de La Mellera, nuestro objetivo.

Mapa de acceso

Al parecer los restos actuales corresponden a un castillo del siglo XI, aunque es muy probable que sus orígenes puedan ser anteriores, muy posiblemente árabes. Documentada desde el siglo XI siendo dueño Ramiro I, heredado posiblemente de su padre Sancho el Mayor, parece ser que se abandonó en el siglo XV apareciendo documentada como en estado ruinoso en el siglo XVII.

Debió de tener gran importancia por estar en un punto estratégico desde el que se domina el curso bajo del Isábena a la perfección, pero no tan bien la parte sur. Desde aquí, en su día se podrían observar los castillos de Fals, Viacamp, Luzás, Monesma, Lascuarre, Castigaleu, Güel, El Mon, Pano y Laguarres.

Hasta nuestros días tan sólo ha llegado un fragmento de un muro de unos 5 metros de alto por medio de ancho, tal vez de la muralla o, quizás por su reducido grosor, de alguna vivienda. Éste se encuentra en el borde interior de un foso que se puede adivinar, bordeando todo el recinto, el cual impediría un ataque directo. Se encuentra prácticamente en su totalidad cubierto por escombros de los que debió de ser la muralla que un día debió fortificó el recinto. No muy profundo, alrededor de un metro y medio y de unos tres metros de ancho en su punto máximo, rodea el perímetro por la parte sur, ya que la norte la protege la pared natural, excavado en la dura roca de conglomerados; recuerda mucho al existente en el Cerro del Calvario de Castro Muñones en La Puebla Castro. Fuera de este perímetro de foso, parecen adivinarse dos aljibes, mucho más grandes -en cuanto a perímetro- que los que nos encontramos por toda esta sierra.
Volviendo al único fragmento de muro que se mantiene en pie, se encuentra en el borde oeste del precipicio de unos 20 metros de altura. En él se pueden apreciar algún mechinal y dos saeteras muy estrechas, y en la parte baja del muro existe un recalce a modo de basamento en la parte que hace esquina y se encuentra más cercana al precipicio probablemente como refuerzo; no parece que posea cimientos, por lo que descansa directamente sobre la roca. Dentro del perímetro protegido por el foso, parece adivinarse los restos de una posible torre, quizás circular como la cercana de Laguarres, de la que quizás podría conservarse en pie la base, hoy cubierta por los escombros de la misma; también una gran explanada donde sería interesante realizar una rápida campaña de excavación.

En las cercanías del este conjunto ruinoso, existe un túnel excavado en la roca de algo más de 20 metros "hábiles" de longitud con expectativas de poseer más, que posiblemente tengan relación con el primitivo castillo de origen musulmán, así como una fuente de la que mana escasa agua fresca. Bajo las ruinas, al pie de la pared, uno de los muchos corrales pastoriles parcialmente excavado en la roca, sobrevive al paso del tiempo. Y poco más se puede decir de estos restos, a la espera de ser descubiertos por completo y estudiados con algo de detalle.